Las enfermedades bucales son más comunes de lo que las personas piensan. Según estudios, aproximadamente un 40% de la población mundial sufre de ellas, ya que se tiende a descuidar mucho la higiene bucal.
Una de las más comunes es la retracción de encías, también conocida como recesión gingival, esta está asociada a síntomas muy dolorosos que pueden durar hasta años.
En este artículo hablaremos sobre esta enfermedad, explicaremos cuáles son sus causas, síntomas, tratamiento, diagnóstico y además dejaremos una lista de recomendaciones para prevenirla.
¿Qué es?
La retracción de encías o recesión gingival es una enfermedad bucal que ocurre cuando la encía comienza a desprenderse del diente, exponiéndolo hasta llegar a la raíz. Debido a que queda un espacio entre el diente y la encía, todas las bacterias que se encuentran en la boca se van acumulando allí, lo que da pie a una infección grave e incluso podría llegar hasta la pérdida de piezas dentales.

Causas
Existen muchos factores que causan este tipo de daño en las encías. A continuación, dejaremos varios de ellas:
Enfermedades periodontales
Las enfermedades periodontales son la causa más común de la retracción de encías. Estas infecciones bacterianas destruyen el tejido de la encía y también del hueso que sirve como soporte del diente.
Genes
Otro factor que puede llegar a causar retracción de encías es tener algún familiar que ya haya sufrido de este problema anteriormente, ya que puede ser genético. Incluso, según estudios, el 30% de las personas que sufren de esto es debido a la genética, sin importar qué tan bien cuiden de su higiene bucal.
Cepillarse los dientes agresivamente
El cepillado de dientes exageradamente fuerte o de forma incorrecta puede causar la retracción de encías, debido a que se empieza a debilitar el tejido.
Cuidado dental insuficiente
Si no hay un cuidado y limpieza dental constante, se irá creando placa en la pieza dental y esto es grave ya que se puede convertir en sarro, esto se va acumulando en la encía y puede llegar a causar retracción en ellas.
Cambios hormonales
Esto solo puede ser una causa en las mujeres, debido a los cambios hormonales que se sufren durante embarazos, pubertad, periodos menstruales e incluso la menopausia, ya que las encías se vuelven mucho más sensibles y hay más probabilidades de que empiecen a retraerse.
El tabaco
Las personas que consumen tabaco son mucho más propensas a sufrir de retracción de encías, todo esto es debido a que el humo hace que se cree placa en los dientes.
Piercings en el labio o lengua
Este es un factor es muy poco común, pero igualmente causa daños. Esto pasa porque cada vez que el piercing tiene algún roce con la encía, se puede empezar a retraer o el tejido se empieza a debilitar.
Mala posición de los dientes
Cuando los dientes no están en la posición que deberían, estos hacen contacto con las encías al momento de morder, lo que provoca que se vaya debilitando y se retraiga.

Síntomas
Muchas personas con este problema al principio no llegan a notarlo hasta que se vuelve muy evidente, ya que los síntomas suelen ser muy leves. Sin embargo, hemos preparado una lista con los más comunes.
· Sensibilidad al frío y al calor.
· Caries que empiezan desde la raíz del diente.
· Sangrado constante en las encías.
· Mal aliento.
· Pérdida de piezas dentales.

Prevención
La mejor forma de prevenir la retracción de encías es teniendo una muy buena higiene bucal. Es vital cepillarse diariamente al menos dos veces al día, usando hilo dental para eliminar cualquier tipo de restos de comida atrapados en los dientes.
Se recomienda el uso de cepillos de dientes que tengan cerdas suaves, que no sean muy duras ya que pueden causar lesiones en las encías. También, se debe tener en cuenta que aprender a cepillarse correctamente es clave, asimismo tener una buena alimentación.
Si se tiene adicción al tabaco o cualquier tipo de cigarrillos, es necesario dejarla a un lado, debido a que es uno de los causantes más comunes de la retracción en las encías.
Tipos
Existen cuatro tipos de recesión gingival, estas se dividen dependiendo de la gravedad de los síntomas que se manifiestan. Son los siguientes:
· Clase I: Es la retracción de la encía pero no llega hasta la unión mucogingival.
· Clase II: Es la retracción de la encía que se extiende hasta la unión mucogingival sin ninguna pérdida dental.
· Clase III: Es la retracción de los tejidos marginales que se extiende hasta sobrepasar la unión mucogingival, teniendo como resultado la pérdida de la inserción periodontal.
· Clase IV: Es la retracción de los tejidos marginales que van más allá de la unión mucogingival con pérdidas graves de tejido blando o del diente.
Diagnóstico
La mejor manera de diagnosticarlo es acudiendo a un profesional. En caso de que presentes alguno de los síntomas que ya fueron mencionados anteriormente, es necesario acudir a un odontólogo quien te dará un diagnóstico más exacto.
Tratamiento
El tratamiento dependerá de la gravedad de la retracción de las encías. En casos leves la mayoría de los dentistas prefieren hacer un chequeo en los pacientes que lo padecen dándole instrucciones para prevenirlo. Sin embargo, para casos más graves sí es necesario tratamientos. Son los siguientes:
Productos desensibilizantes
El objetivo de estos productos es reducir la sensibilidad en los dientes y encías, debido a que se encargan de calmar los síntomas de los nervios que están ubicados allí. Estos vienen en distintas presentaciones, ya sea en pasta, barnices e incluso enjuagues bucales, algo que también ayuda a la higiene bucal.
Cirugía
La cirugía solo se debe aplicar en pacientes que tengan un daño severo, que necesiten de intervención quirúrgica obligatoriamente. No se recomienda en absoluto en casos no tan graves.
Restauración
Esta opción es más que todo para personas que sufren de pérdida de piezas dentales. Los odontólogos se encargan de reconstruir la pieza que se ha perdido o el pedazo de diente con resina, hecho a la medida y del color más natural posible.
Carillas desmontables
Las carillas de encías son el tratamiento más común cuando ocurre una retracción grave. Estas normalmente son hechas de silicón o acrílico, ajustables a la mandíbula cubriendo así toda la raíz del diente y donde hay retracción.
Ortodoncia
Como mencionamos anteriormente, cuando los dientes no están alineados como deberían, estos tienden a chocar con la encía creando una retracción en ellas. La ortodoncia es una excelente opción para corregir este problema para así evitar que siga ocurriendo.